La facilitadora María Soledad González es quien nos vuelve a introducir en la Biodanza, un tipo de meditación activa y grupal, que permite conectar con nuestra esencia más pura, liberarnos de tensiones y mejorar nuestra salud emocional.
En Biodanza el grupo permite ir integrando una red amorosa de comunicación y presencia presente.
“Es trascender al “yo” y al “tú” para conformar un “nosotros”, proceso que requiere progresividad, ya que se actúa de forma gradual. Es siempre respetuosa del ritmo individual”, explica María Soledad.